El mercado de valores se mueve por las emociones de sus participantes, mientras que el valor fundamental se basa en el rendimiento real del negocio. Por lo general, el sentimiento del mercado refleja la reacción de los inversores ante diferentes eventos, por lo que este indicador puede aparecer demasiado tarde para ser relevante o podría no demostrar el estado real de la situación. Siempre ten cuidado con los indicadores de sentimiento del mercado, ya que pueden interferir con las inversiones a largo plazo.
Además, debes recordar que los medios pueden afectar significativamente el sentimiento del mercado. Las narrativas demasiado optimistas pueden crear burbujas, mientras que los ciclos de noticias negativas pueden llevar a ventas de pánico. Por ejemplo, los medios podrían aumentar la preocupación de los inversores durante los períodos de incertidumbre económica. Asimismo, existe un estudio que demuestra que el sentimiento en los medios puede identificar señales tempranas de una crisis económica.
No debes confiar únicamente en el sentimiento del mercado, pues hay otros indicadores para el análisis del mercado. Por ejemplo, si el indicador refleja un sentimiento bajista y el análisis técnico demuestra un soporte para el negocio, entonces un inversor podría comprar acciones. De lo contrario, un sentimiento alcista combinado con señales de sobrevaloración según el análisis fundamental podría requerir un enfoque más cuidadoso.
Ejemplos
Las variaciones bruscas en el mercado de valores entre sentimientos alcistas y bajistas generalmente se deben a la incertidumbre económica y política. Por ejemplo, a principios de 2020 el sentimiento del mercado era mayormente bajista. Los inversores esperaban una crisis económica. Las acciones se vendían masivamente y los precios bajaban. Sin embargo, cuando los gobiernos tomaron medidas para estimular la economía y los científicos probaron las vacunas, los inversores mostraron un mayor optimismo, lo que activó una fuerte recuperación del mercado.
A veces, las redes sociales pueden afectar el sentimiento del mercado. Solo recuerda a Tesla y a su CEO, Elon Musk. Las acciones de Tesla caen y el sentimiento cambia de optimista a pesimista a raíz de sus publicaciones ambiguas en redes sociales, mientras que el estado real de la empresa es estable y no hay razones objetivas para una caída tan grande.