Te contamos mucho sobre estrategias de trading técnico. Pero queremos recordarte que hay otra parte importante del trading: análisis fundamental. Y, si hay análisis fundamental, deberían existir también estrategias de trading fundamentales.
Comencemos con las más comunes y simples: la estrategia de carry trade.
Esta estrategia se basa en las tasas de interés. En nuestro curso de la Academia FBS, te dijimos que las tasas de interés son un indicador perfecto de las condiciones de todas las economías del mundo. Es una forma rápida y clara de estimar qué economía está más fuerte y, como resultado, qué moneda se fortalecerá. Un país con una economía débil tiene una tasa de interés baja. Es una forma que tiene el banco central de fomentar el crecimiento crediticio y ofrecer dinero barato a las empresas para impulsar la economía. La moneda de dicho país es débil. Una economía fuerte tiene inflación al alza y un fuerte crecimiento del PIB. Para limitar la inflación, el banco central tiene que aumentar la tasa de interés, haciendo que su moneda suba.
La diferencia en las tasas de interés brinda a los inversores a largo plazo la oportunidad de ganar.
Entonces, ¿cuál es la idea de la estrategia de carry trade?
La idea principal de la estrategia es comprar una divisa con una tasa de interés alta y vender una divisa con una tasa de interés baja.
Un trader toma prestada una divisa barata (con una tasa de interés baja); por ejemplo, el yen japonés. La invierte en activos rentables, como el dólar australiano. El yen será la divisa de financiación, y el dólar australiano es la divisa de inversión. Como resultado, los flujos de capital de Japón a Australia aumentan y la demanda del dólar australiano aumenta. Recuerda que los flujos aumentan cuando hay un sentimiento favorable al riesgo, por lo que los traders quieren invertir en monedas más rentables pero arriesgadas. Al final, el AUDJPY se dispara.
Otra cosa que hay que mencionar es el swap. El swap es el procedimiento de trasladar posiciones abiertas de un día de trading a otro. Si un trader extiende su posición más allá de un día, estará lidiando con un costo o una ganancia, dependiendo de las tasas de interés vigentes.